Rehabilitación integral de una masía obsoleta, originaria del siglo XIII, para adaptarla a los usos actuales. Incluye el diseño de todos los espacios y el mobiliario, una piscina climatizada y un espacio interior ajardinado que deja aparentes los bancales de roca existentes en la parte más recluida de la casa. Se respeta la volumetría original -los vacíos y los llenos- y se modifica un volumen discordante añadido hace 20 años.
El interiorismo pone en valor la atmósfera cerrada detrás de las paredes de piedra y, en las zonas de día, se abre generosamente hacia el paisaje. En cualquier caso, el proyecto deja que el ambiente nuevo sienta la presencia anterior sin ceder protagonismo formal y funcional.
